Los acentos fueron obviados por cuestiones tecnicas.
Una pulsera ayuda a atender emergencias de personas mayores.
Para algunos es un “acompañante invisible” que les salva la vida en medio de la noche, mientras que para otros es el “talisman” que los deja seguir siendo autonomos e independientes mas alla de la octava decada de vida. “Mis hijos cierran la puerta [de casa] cuando se van a trabajar y siento que si necesito algo o tengo algun problema, estoy acompañada”, dice Emilia Varas, de 81 años, que en julio sufrio un accidente en la calle.
Se trata de un dispositivo, similar a un reloj pulsera, a traves del cual con solo apretar un boton los adultos mayores que viven solos pueden recibir asistencia rapidamente y reducir las emergencias frecuentes del envejecimiento. Cuando se comunican con la central, psicologos y asistentes sociales indagan sobre los sintomas para solicitar la atencion medica en el menor tiempo posible o acompañan en casos de soledad. De hecho, las dos terceras partes de las pulsaciones de la pulsera ocurren porque los usuarios necesitan comunicarse con alguien para no sentirse solos.
Entre las principales causas de emergencias, este servicio que ofrece la empresa Atempo registra las descompensaciones, las caidas y los traumatismos, las cefaleas, las nauseas y los problemas digestivos. El usuario promedio tiene entre 70 y 75 años. "El 87% de los problemas frecuentes en la tercera edad, como pueden ser el infarto, el accidente cerebrovascular o las caidas, ocurre en el hogar. Por lo tanto, es clave en esa etapa de la vida cubrir todas las emergencias domiciliarias", explico el doctor Fernando Ordoqui, que desarrollo la pulsera de teleasistencia domiciliaria junto con el ingeniero Felix Safar.
La teleasistencia para la tercera edad no es un servicio nuevo en el mundo. Se usa en Europa y en los Estados Unidos, pero en la Argentina recien lleva un año de aplicacion. Un estudio sobre 50 de los 600 usuarios en La Plata, Rosario, Cordoba y Buenos Aires demostro que las mujeres son las que mas usan el servicio, mientras que los hombres prefieren que un teleasistente les recuerde tomar algun medicamento.
El temor a sintomas fisicos no frecuentes (mareos, taquicardia, agitacion nocturna) y la sensacion de soledad son las primeras causas de uso de la teleasistencia. Esta ayuda tambien a reducir el estres y la ansiedad de los familiares o los cuidadores, segun un estudio presentado en el ultimo Congreso Argentino de Gerontologia y Geriatria.
"Un 60% de la poblacion adulta mayor del mundo padece enfermedades cronicas, y un 10% es vulnerable, vive solo o ha sufrido una viudez reciente. La teleasistencia domiciliaria es muy util justamente para ese 70%", explico la doctora Sara Iajnuk, de la Sociedad Argentina de Gerontologia y Geriatria.
Un talisman.
Para Marion Burghardt, tan coqueta que se resiste a decir la edad, la pulsera es un talisman. "Me da seguridad, proteccion y tranquilidad... La uso como quienes llevan una pata de conejo -se rie-. Es asi de simple. No importa la edad, porque podria tener 16 años y viviendo sola me puedo caer, golpearme la cabeza y no llegar a la puerta o al telefono para pedir ayuda."
Fue una de las primeras personas que en el pais comenzaron a utilizar el servicio. Muy activa -estudia ingles, va a la pileta y se reune con amigos para jugar a las cartas o el burako-, Marion necesito pulsar la pulsera mientras hacia abdominales. "Cuando quise subir el torso, senti que no podia. Mi profesora me quiso ayudar, pero como mi medico estaba de vacaciones y la ambulancia de la prepaga tardaba en llegar, pulse el boton y enseguida llego la ambulancia, y al rato ya me podia sentar."
A prueba de agua.
El sistema esta diseñado para la tercera edad: el pulsador es a prueba de agua, por lo que no es necesario sacarselo para ducharse, y tambien permite atender las llamadas telefonicas desde cualquier habitacion.
"Aunque ando despacio por la casa, sobre todo despues del accidente en la calle, se que si me pasa algo pulso el boton y enseguida me atienden", comenta Emilia, que comenzo a usar la teleasistencia por decision de su hijo mayor. "A partir del incidente que sufrio el año pasado -confirmo Alejandro, el hijo de Emilia-, vimos con mi hermana que su independencia habia disminuido un poco, entonces consideramos que el servicio nos daba tranquilidad."
La pulsera es un transmisor que tambien se puede usar como un colgante que se comunica con una central conectada a la linea telefonica del hogar. Esa central recibe la señal y genera por via telefonica la conexion con el centro de atencion via un numero gratuito (0810-122-2836). La central se comunica a traves de un parlante ambiental de alta sensibilidad que se puede oir desde todos los ambientes. El valor del servicio es de 120 pesos por mes.
"Lo vimos funcionando en Europa y los Estados Unidos y decidimos «argentinizarlo»: a la atencion de la emergencia en la tercera edad le agregamos el acompañamiento de los que viven solos -comento Ordoqui-. El sistema permite reducir la automedicacion, cubrir las emergencias aprovechando la ventana terapeutica de cada patologia y, asi, reducir las secuelas que provoca la demora en la atencion."
Segun la doctora Iajnuk, este tipo de servicios "es fundamental" para la buena atencion de las emergencias. "Al tener registrada la historia clinica de cada usuario, este recibira atencion medica aunque se desmaye, se caiga o no pueda llegar hasta el telefono o la puerta para pedir ayuda", dijo.
Un estudio sobre las demoras en la atencion hospitalaria en la tercera edad por el doctor Paul Barberousse, del Instituto de Neurologia del Hospital de Clinicas de Uruguay, mostro que son varias las causas que impiden cumplir con el tiempo minimo para administrar la terapia indicada. Las mas frecuentes son no poder dar el alerta porque se vive solo o es imposible alcanzar el telefono, demorar la consulta medica porque se subestiman los sintomas, tardar en ubicar el telefono del servicio de emergencias o derivar al paciente a un hospital sin el nivel de complejidad suficiente.
"Los primeros en brindar respuesta son los familiares y allegados, que en la mayoria de los casos desconocen la mejor forma de actuar -concluye Barberousse en Archivos del Instituto de Neurologia -. Ademas, encontramos que el 47% de los pacientes que padecen ataques en el domicilio no llega al centro medico en los tiempos minimos para aplicarles un tratamiento."
Fuente: La Gaceta - Tucuman
No hay comentarios.:
Publicar un comentario