(Los
acentos fueron obviados por cuestiones tecnicas)
Intervenciones digitales reducen riesgo
de enfermedades cardiovasculares.
Las intervenciones digitales en salud (DHI),
como la telemedicina y los recordatorios con mensajes de texto, reducen el
riesgo relativo de sufrir enfermedades cardiovasculares (ECV) en un 40 %, según
un estudio reciente.
Unos investigadores de la Clínica Mayo
(Rochester, MN, EUA) realizaron una búsqueda sistemática en PubMed, MEDLINE,
EMBASE, el Registro Central de Cochrane de Estudios Controlados y en otras
fuentes, de artículos donde se estudiaran elementos de las DHI y la respuesta
de los factores de riesgo y de las ECV. Los autores extrajeron la respuesta de
las ECV y la información sobre los factores de riesgo de ECV, como el peso,
índice de masa corporal (IMC), presión arterial (PA) y los niveles de lípidos,
de 51 artículos de texto completo que cumplieron los criterios de validez y de
inclusión.
Los resultados mostraron que las DHI reducen
significativamente los resultados de las ECV. Las estrategias basadas en la
Web, como correo electrónico, teléfonos móviles, aplicaciones móviles, mensajes
de texto y sensores de monitoreo redujeron el riesgo absoluto de sufrir ECV en
alrededor del 7 %, más que el uso de estatinas, aspirina o medicamentos contra
la hipertensión. Reducciones concomitantes fueron vistas en el peso y el IMC,
pero no en la presión arterial. Encontraron que algunas DHI son más eficaces
que otras y que las modalidades basadas en Internet, los mensajes de texto y la
telemedicina bajan el riesgo más que los correos electrónicos y el seguimiento
de la información. El estudio fue publicado en la edición de abril de 2015 de
la revista Mayo Clinic Proceedings.
“Debido a que el uso de DHI no reduce directamente
el riesgo de ECV, estos beneficios observados probablemente reflejan una mayor
adherencia a los tratamientos preventivos basados en la evidencia como las
estatinas, la aspirina o los bloqueadores beta”, concluyeron el autor
principal, R. Jay Widmer, MD, PhD y sus colegas, de la división de enfermedades
cardiovasculares. “Las DHI tienden a provocar cambios de comportamiento,
mientras que los medicamentos tratan un trastorno directamente. Una combinación
de los dos podría ser óptima”.
“Puesto que se tienen ahora disponibles para
descarga casi 50.000 aplicaciones relacionadas con el cuidado de la salud y
numerosas soluciones digitales para intervención sanitaria basadas en Internet,
se amerita estudiar de nuevo los beneficios de las intervenciones digitales en
salud sobre la prevención y la respuesta tanto primaria como secundaria de las
enfermedades cardiovasculares”, sugirieron los autores.